“Apagón nuclear total”: Alemania desconectará las últimas 3 centrales nucleares
Los Verdes lograron su misión y en abril se llevará a cabo el “Apagón nuclear” que prometió Merkel hace 12 años. La energía será reemplazada por carbón, y gas proveniente de Qatar e Irak.
A pesar de la crisis energética que atraviesa Alemania, el gobierno socialista de Olaf Scholz confirmó que se mantiene el objetivo de proceder al “apagón nuclear” el 15 de abril, día que se desconectarían las últimas tres plantas y no habrá más energía nuclear dentro de la matriz energética alemana.
El apagón fue planificado por la entonces canciller Angela Merkel en 2012, tras la catástrofe en Fukushima después de que Japón fue golpeada con un terremoto y un tsunami. A pesar de que las circunstancias alrededor de ese incidente jamás ocurrirían en suelo alemán, la mandataria uso la oportunidad para poner en marcha un plan para lograr una economía verde sin energía nuclear.
Las plantas debían desconectarse el pasado 31 de diciembre, pero se aprobó en 2022 un aplazamiento de tres meses y medio al calendario para darle más tiempo al gobierno para conseguir reemplazarla. En definitiva, Scholz consiguió la peor alternativa en cuanto a cuidado ambiental: se importará gas y petróleo desde Irak y Qatar.
Es importante aclarar que la generación de energía nuclear produce 0 (cero) gases de efecto invernadero y su impacto medioambiental es nulo, y solo hay contaminación en caso de que haya una falla seria en el sistema, como solo ha ocurrido en Chérnobil (1986) y Fukushima (2011), la primera causada por la desidia burocrática de una nación comunista y la segunda por el golpe consecutivo de un terremoto y un tsunami.
La ministra de Medioambiente, la verde Steffi Lemke, ratificó a la prensa que a pesar de todos los beneficios de la energía nuclear, esta vez no habrá una nueva prórroga o situación de reserva para dichas plantas, y se desconectarán y desmantelarán completamente.
“Los riesgos de la energía atómica son incontrolables”, añadió la ministra, mintiendo descaradamente. “Apostar por el desarrollo de las renovables será, a la larga, el mejor medio para garantizar una estabilidad de precios en el sector”, aseguró.
La decisión afecta a las últimas plantas nucleares que le quedaban a Alemania después del masivo desmantelamiento del gobierno de Merkel. Se trata de la Isar 2 y Neckar 2, en el sur del país, y Lingen, en el centro.
La decisión fue promulgada por el Partido Verde, parte de la coalición de gobierno, quien hizo de su caballo de batalla en la campaña el fin de la era nuclear en Alemania, que solo se explica con el lobby de grandes empresas de energías renovables.
Los liberales del FDP, socio minoritario en el gobierno, habían intentado que las tres plantas en funcionamiento o en reserva siguieran funcionando hasta 2024 o hasta que termine la guerra en Ucrania; pero sin éxito.Desde el inicio de la invasión rusa de Ucrania, Alemania había perdido un vital suministro de gas ruso a través del Nord Stream; una respuesta de Putin a las sanciones occidentales. Rápidamente, Scholz salió a buscar en Medio Oriente y en Noruega suministro de gas alternativo, respaldándose en la energía nuclear para llenar este vacío hasta que lo lograra.
Tras firmar con la monarquía qatarí y con el gobierno iraquí, las tres últimas plantas proporcionaban hacia finales de 2022 apenas un 6% del total del consumo eléctrico, pero se consideran fundamentales para garantizar la seguridad del suministro.
Pero inexplicablemente, los Verdes accedieron a aumentar las explotaciones de carbón con tal de lograr el suministro que permita desconectar las plantas nucleares. El “apagón de carbón” fue movido consecuentemente del periodo 2022-2030 al 2030-2038.
Fuente: Derecha Diario