El Gobierno de Mendoza autorizó un cambio importante en los contratos: la revisión tarifaria ahora será trimestral y no semestral. Cómo se aplica y los otros cambios que vienen.

En los últimos meses hubo cambios profundos en el vínculo entre el Estado y las empresas concesionarias de servicios públicos, justo a poco tiempo de que haya un cambio de Gobierno. En el servicio eléctrico es donde más modificaciones hubo y a un mes de dejar la gestión, Rodolfo Suarez accedió a un pedido que las empresas, particularmente EDEMSA, habían realizado tiempo atrás: que haya otra frecuencia en los aumentos de tarifas y que se apliquen de manera más ágil.

El Gobierno accedió y ahora habrá 4 aumentos de tarifa al año, en vez de dos. Se trata de la actualización del Valor Agregado de Distribución, la porción local y más relevante del costo de la electricidad para los usuarios. El cambio lo autorizó Rodolfo Suarez a través del Decreto 2348, donde dice: «Modifíquese el Procedimiento de Adecuación del Valor Agregado de Distribución (VAD) dispuesto en el Decreto N°48/2017(…) cuya implementación regirá a partir del 01 de febrero de 2024».

El cambio se da en medio de una «revolución interna» en el vínculo. Es que el propio Suarez había decidido ya prorrogar la concesión de EDEMSA por 20 años más, aún varios años antes del vencimiento. El contrato original caducaba en 2028. Ahora los accionistas estarán hasta 2048 en condiciones más favorables: el mismo Gobierno bajó el canon de concesión del 10 al 6%, transfirió el costo de las obras a los usuarios y ahora concedió aumentos del VAD cada 4 meses. En el medio hay un dato clave: la incertidumbre económica y sobre todo la inflación, que saca de escala cualquier decisión y genera desfasajes enormes.

El otro tema importante que se superpuso con todas las decisiones es el cálculo quinquenal de la tarifa de lo que era el último período tarifario, que se ejecuta ahora. Por eso el impacto inmediato de los aumentos de fin de año será muy fuerte, pues el VAD aumentará un 70%. Eso tendría un impacto de más del 30% para los usuarios. El siguiente aumento será muy próximo porque está en vigencia la revisión trimestral.

Nuevo esquema

El «año eléctrico» no será de enero a diciembre, sino de «agosto a septiembre». Los aumentos se aplicarán en febrero, mayo, agosto y noviembre, siempre calculando los costos del trimestre anterior a la aplicación. Las eléctricas deberán presentar la pretensión de aumento tomando en cuenta cuánto subieron sus costos, principalmente el valor de sus insumos eléctricos, no eléctricos y los salarios. Hasta ahora las revisiones eran semestrales. En la revisión tarifaria del 2022, EDEMSA ya había solicitado cambiar el mecanismo de adecuación del VAD para hacerlo trimestral. El Gobierno se negó, pero ahora accedió.

Otra impronta que potencian es la «autogestión» en las obras de expansión del servicio y la obligación de las distribuidoras de devolver esa inversión. Es decir, que una casa, un barrio o un loteo nuevo inviertan para tener el tendido eléctrico y las empresas se lo reintegren una vez que ya estén conectados a través de descuentos en la boleta de la luz.

La relación entre las empresas privatizadas y el Estado mendocino fue tortuosa y plagada de distorsiones. A Suarez le tocó decidir bajo presión, pues, por ejemplo EDEMSA tenía un reclamo millonario ganado de antemano por los ingresos no percibidos. La ejecución de esa deuda generaría un problema. Para la empresa la deuda era de 140 mil millones. Para el Gobierno, mucho menos, pero grande igual.

En el mismo plano estaba la amenaza latente de una demanda ante el CIADI, pues aunque los dueños reales de EDEMSA son mendocinos, parte de las acciones están en manos de empresas radicadas en el exterior. La solución fue «ceder» 20 años de concesión, bajar el canon y otorgar otros beneficios a la empresa, que es liderada por José Luis Manzano. El mismo grupo es titular de la distribuidora EDENOR en el AMBA y otras empresa eléctricas.

EDEMSA nació en 1998 como producto de la privatización de EMSE, la empresa estatal. El primer concesionario fue la francesa Electricité, que dejó el negocio por la falta de tarifas, reclamó y ganó un juicio millonario en el CIADI.

En 2006 comenzó el proceso para que una sociedad liderada por José Luis Manzano se quedara con la empresa. Edemsa fue la punta de lanza para que Andes Energía y su subsidiaria eléctrica Andina crecieran en ese tipo de negocios. Andina tiene el 51% de las acciones de SODEMSA y esa empresa está ramificada en varias compañías radicadas en el exterior.

«Andina PLC es accionista del 5% de las acciones de la sociedad IADESA, que titulariza a su vez el 60% de las acciones de SODEMSA (titular del paquete de acciones clase “A” de E.D.E.M.S.A.). El restante 95% de las acciones de IADESA son titularizadas por la sociedad Andina Electricidad S.A., cuyo 95% de acciones pertenecen a Andina PLC.

El 40% de las acciones de SODEMSA son propiedad de la sociedad Mendinvert S.A., cuyos accionistas son en un 95% IADESA y en un 5% Andina Electricidad S.A. De lo referido y de la notificación de la controversia citada, surge que Andina PLC posee indirectamente un interés controlante del 51% de las acciones de E.D.E.M.S.A. (acciones clase “A”)». Ese es parte del laberinto accionario.

Fuente: Mdzol