Inversión millonaria para el nuevo «Silicon Valley de Uruguay»: así será la ciudad del futuro en Colonia
Será un hub tecnológico con unas 50 empresas y que alojará 30.000 personas. Habrá viviendas, espacios laborales, comerciales, educativos y entretenimiento
Uruguay continúa captando inversiones en Real Estate. La última –y ambiciosa–novedad llega desde la histórica Colonia del Sacramento: el 29 de abril la Junta Departamental de esa jurisdicción aprobó el contrato plan (acuerdo público-privado) para desarrollar un proyecto que pretende ser un hub de innovación orientado a la industria global del conocimiento. Para graficarlo, apuestan a crear un Silicon Valley en la región, una verdadera «ciudad del futuro».
La urbanización, bautizada +Colonia, será completamente abierta, de acceso público y estará integrada a la ciudad. Se construirá sobre un terreno de 500 hectáreas, propiedad del empresario argentino Carlos Bastitta, radicado en ese país hace 15 años.
Su hijo Eduardo, socio de esta iniciativa, además de cofundador y CEO de Plaza Logística, desarrollador de seis parques logísticos en Buenos Aires, recuerda cómo surgió la idea: «Desde que compró esas tierras –hace más de 30 años- mi padre siempre tuvo el sueño de generar una ciudad con mucha naturaleza, principalmente peatonal, y donde solo hubiese autos eléctricos pequeños (del estilo de los carritos de golf) para potenciar a Colonia y su comunidad».
Pero, si bien la propuesta actual respeta esta esencia, en 2018 Eduardo tomó las riendas y se unió a otros emprendedores rioplatenses (como el desarrollador Melitón González del Solar y el referente tecnológico Francisco Okecki) para darle un nuevo impulso a esta iniciativa.
A partir de entonces, se inició la conceptualización y el diseño de este nuevo polo, que verá el comienzo de las obras de infraestructura en las próximas semanas.
En tanto, antes de fin de año, los promotores prevén que podrá arrancar la construcción de los nueve edificios de baja y media densidad, que conformarán el primero de los distritos. Estos departamentos implicarán -como máximo- 18 meses de obra ya que se construirían con sistemas industrializados. De este modo, las unidades se entregarían en 2024.
Esta etapa comprenderá u$s100 millones de inversión. Se harán entre 600 y 800 unidades residenciales –la mayoría de 30 m2 a 50 m2- y habrá 5.000 m2 de oficinas y basamento comercial, con grandes superficies de espacios públicos y amenities.
Ante la consulta de iProfesional, Bastitta describió: «El proyecto no involucra solo desarrollo del tipo de Real Estate, sino que está pensado para el mundo de la economía del conocimiento».
La idea es que no sea solo un lugar de trabajo sino un modo de vida
Allí se instalarán empresas, start ups, fondos de venture capital, universidades y centros de capacitación, «con la oportunidad de interactuar entre ellos y, sobre todo, de que puedan crear sus propios ecosistemas».
La ciudad del futuro: vida en comunidades y sustentable
Según explicó el empresario, buscan «una redefinición de lo que es un hub» de modo tal que no sea solo un lugar de oficinas, sino de vida, es decir, de vivienda; de trabajo; de entretenimiento, de desarrollo personal; y de capacitación.
«Por eso decimos que el hub debe estar conformado por cuatro valores: live, work, learn and enjoy. Esto es clave. Las empresas de tecnología que antes lo entiendan, tendrán una ventaja competitiva importante en relación al resto», advirtió.
Así surgió la propuesta de urbanizar con la mirada puesta en lo que piden los millennials y centennials, dado que «como en el mundo de la tecnología el desafío más importante es la captación y retención de talentos jóvenes que trabajan en esas compañías, y en Latinoamérica los jóvenes suelen tener dificultad para obtener financiamiento y créditos, las compañías se tienen que involucrar en las soluciones habitacionales de sus empleados y comunidades, y ayudarlos a acceder», recomendó.
De este modo, «+Colonia es un aporte a ese dilema del mundo de la tecnología. Las compañías podrán ir creando sus distritos para atraer a empleados a vivir en sus comunidades, en el marco de una ciudad del futuro, sustentable, con naturaleza y gobernanza».
Además, explicó el empresario, «esto es clave también por el drama que existe en el mundo tecnológico con respecto a que al tener a los empleados y comunidades diseminadas (con trabajo a distancia) no se incorpora la cultura empresarial, ni se incentiva la innovación o la creatividad».
Sin embargo, aunque los jóvenes son el público objetivo principal de este proyecto, Bastitta aclaró que será «una ciudad para todos los perfiles».
El precio del m2 rondará los u$s2.500
Si bien aun no se lanzó la comercialización de las viviendas, dado que están en proceso de licitar las diversas propuestas constructivas y faltan algunas aprobaciones oficiales (permisos de la Intendencia y de la Dirección Nacional de Medio Ambiente), Bastitta estima que el valor inicial del metro cuadrado será de u$s2.500, en promedio.
Además, agrega: «En Uruguay tenemos la ventaja de tener crédito hipotecario así que estamos trabajando con varios bancos para mejorar y facilitar el acceso a financiación. Eso es también un factor muy importante para que el desarrollo pueda traccionar la demanda».
Los impulsores del plan ya se encuentran en contacto con desarrolladores inmobiliarios uruguayos, argentinos y de la región. También, con compañías globales, instituciones educativas y empresas de tecnología, de transporte y de otros servicios, centros médicos, de negocios y comercios que se ajustan al perfil inversor que buscan promover. Según estiman, esperan convocar a más de 50 empresas.
El nuevo hub apunta a albergar a unas 50 empresas y unas 30.000 personas
Bastitta explicó: «Este no es el proyecto de una empresa. Es muy flexible. Los desarrolladores inmobiliarios irán tomando macrolotes para construir sus propios edificios, en el marco de distritos que no necesariamente estarán controlados por una única compañía. También, puede haber empresas que tomen algunos macrolotes y desarrollen sus propios distritos o que le designen a un inversor o desarrollador que se los construya».
Y brindó más detalles: «El proyecto es totalmente abierto en todas las áreas. En temas financieros participan siete bancos. Sobre transporte, hay compañías marítimas y aéreas. Y, en temas educativos, tenemos varias compañías, universidades y capacitadoras digitales».
En las obras del primer distrito ya están trabajando desarrolladoras de origen argentino, como Eidico y Argencons, ambas con amplia experiencia en el mercado residencial. Además, en urbanismo, está el estudio internacional Gómez Platero.
En tanto, estas no son las únicas interesadas. Bastitta confirma que hay varios «master developers, cada uno de los cuales fue tomando los productos que eran de su especialidad y se los repartieron. Se está trabajando colaborativamente en la definición del masterplan por lo que los anuncios de lanzamientos se harán en forma coordinada».
Dado que el proyecto se encuentra en una etapa incipiente, desde Eidico se limitaron a confirmar que están interesados en ser parte, pero que aun no tienen detalles para informar: «Por la experiencia y la trayectoria que tenemos en desarrollos residenciales, el dueño de la tierra nos invitó a participar en el diseño del masterplan desde el origen. El rol de la empresa es contribuir en esta faceta, teniendo en cuenta que habrá múltiples usos: comerciales, laborales y servicios, entre otros».
En total, el proyecto implicará 10 años de obras con una inversión estimada en u$s1.900 millones. Una vez finalizado, habrá 30.000 personas viviendo. Se estima que generará 6.000 puestos de trabajo en la economía del conocimiento, además de otros 2.000 en construcción y servicios. En particular, para la primera etapa que está por iniciar, el cálculo es de aproximadamente 600 empleos.
Una smart city con «cerebro propio»
El proyecto, ubicado en la zona este de Colonia y a 800 metros del puerto, está a minutos de ciudades como Buenos Aires, Punta del Este y Montevideo. En tanto, incluye siete kilómetros de costa natural con arenas blancas, dos canteras y una laguna, además de bosques y naturaleza que se mantendrá –según informan- a partir de políticas de construcción amigable con el ambiente.
«En ese sentido, la ciudad nace de la inspiración en los valores de las nuevas generaciones: libertad, diversidad, inclusión y el respeto por el ambiente», señalan. Desde ahí se establecen dos ejes que atraviesan toda la planificación, que son la sustentabilidad y el uso de la tecnología para desarrollar una smart city.
«Buscamos usar desarrollos como blockchain, inteligencia artificial e Internet de las cosas, para brindar soluciones individuales y colectivas a los habitantes. La ciudad tendrá su cerebro propio, un data center que irá aprendiendo los hábitos de los ciudadanos, y a partir de ellos generará algoritmos para hacer más sustentable la ciudad: por ejemplo, optimizará el uso de energía, la iluminación pública o el servicio de recolección», ejemplificó Okecki, director ejecutivo en +Colonia.
Desde el punto de vista de la sustentabilidad, +Colonia contará con redes distintas para agua potable y para aguas grises (no potables pero útiles para riego y otras necesidades) generando un doble impacto positivo en el uso, consumo y potabilización del agua.
La movilidad también estará anclada en este valor: se comprometen a reducir al mínimo el parque automotor privado y priorizar las caminatas por senderos verdes, así como el uso de bicicletas comunitarias y monopatines eléctricos. No obstante, habrá un sistema de transporte urbano que conectará la ciudad con el casco histórico y el puerto.
En su planificación, la ciudad incluye también espacios públicos verdes, circuitos para el deporte, facilidades para reciclar; eficiencia en los recursos y, por lo tanto, también en los gastos, entre otros beneficios para su comunidad.
Consultado sobre cómo es la recepción de esta propuesta entre los residentes de Colonia, Bastitta sostuvo que «tras dos años de interacción y diálogo constructivo permanente, el feedback es muy positivo y el apoyo es total. Colonia es una ciudad muy cosmopolita y abierta al turismo por lo que se beneficiará de este desarrollo».
Fuente: iprofesional