La energía solar que permite cultivar en simultáneo llega al campo argentino
La empresa argentina Itasol está cerrando un acuerdo con el Inta para empezar a desarrollar la tecnología Agro PV en el país, un tipo de energía fotovoltaica que duplica el uso de la tierra al permitir tanto la generación eléctrica como la producción agroganadera.
La nueva tecnología duplica el uso de la tierra al generar electricidad sin afectar la producción agrícola y ganadera, con una ganancia en los rendimientos de alrededor del 60%.
Antes ambas actividades ejercían una intensa competencia por el suelo, lo que terminaba desplazando a los parques solares argentinos hacia tierras de poca fertilidad. Si bien en nuestro país el mejor recurso fotovoltaico se localiza justamente en estas zonas desérticas como el NOA y gran parte de Cuyo, la Pampa Húmeda presenta mejores condiciones solares que muchas áreas de Europa y su cercanía con las grandes ciudades del país -como Buenos Aires, Córdoba o Rosario- elevan su competitividad en términos de transporte eléctrico y la tornan como una alternativa muy interesante.
En Europa la mencionada competencia era peor dado a la menor disponibilidad de tierras y la balanza comercial deficitaria en los dos sectores impone una fuerte presión para maximizar sus rendimientos. Así surgieron los primeros proyectos de Agro PV en Francia e Italia en el 2011, para luego ir expandiéndose poco a poco por toda Europa y otros rincones del mundo.