Proponen swap con Chile para evitar apagones en las provincias del norte
El secretario de Energía de la Nación, Darío Martínez, se reunió con su par trasandino, Claudio Huepe, buscando compensar el menor volumen que se enviará desde Bolivia y que pone en jaque el sistema eléctrico de varias provincias.
Nación reconoció que necesita una inyección extra de gas para el Noroeste Argentino para garantizar el funcionamiento de las centrales de generación eléctrica.
El plan del gobierno nacional de realizar un intercambio, o swap, en la provisión de gas natural con Chile apunta a un gran problema que tiene el gobierno por delante y que es la posibilidad, cada día más cercana, de que las provincias del norte no tengan suficiente gas en este invierno para el sistema de generación eléctrica.
Con esa crisis por delante, el secretario de Energía de la Nación, Darío Martínez, se reunió la semana pasada con el recién designado ministro de Energía de Chile, Claudio Huepe, para avanzar lo más rápido posible en un acuerdo entre ambos países que blinde a los usuarios del noroeste argentino.
La crisis se debe a que, si bien aún no se cerró la negociación por la sexta adenda del contrato de importación de gas natural de Bolivia, desde Energía dan casi por hecho que Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) no podrá enviar más de 10 millones de metros cúbicos de gas por día en los meses del pico de invierno.
El volumen de metros cúbicos diarios a cubrir es de 2 millones
Esto implica una caída del 28,5% con respecto a los 14 millones de metros cúbicos que se enviaron desde el Altiplano en el invierno pasado. Pero ese no es el problema más grave.
De acuerdo a los cálculos realizados por la secretaría de Energía, las provincias del norte, en donde no hay forma que llegue el gas de Vaca Muerta, necesitan una inyección desde Bolivia de, al menos, 12 millones de metros cúbicos por día para atender tanto a la demanda residencial como a la de las usinas de generación térmica.
Ese nivel no estaría garantizado con el recorte de los envíos bolivianos y es la razón por la cual se busca avanzar en un salvavidas trasandino, una suerte de devolución de gentilezas al auxilio que Argentina le dio el año pasado a Chile cuando por un temporal en el mar no podían recibir los buques metaneros.
Precisamente, el esquema al que apunta Martínez es el de recibir parte del gas natural licuado (GNL) que Chile importa, a cambio del gas natural por gasoducto que desde Vaca Muerta se pueda entregar.
Esta alternativa fue inicialmente propuesta al gobierno argentino por empresas que exportan GNL a Chile pero que también tienen desarrollos de gas en la formación shale.
Martinez explicó que: “tenemos un par de opciones pero la mejor es enviar desde Argentina todo el gas que podamos ahora, aprovechar además para que las empresas produzcan y vendan más, y ellos nos estarían devolviendo gas en el norte a la máxima capacidad posible”.
Este punto del norte argentino lo que permite es el ingreso del gas ya regasificado que Chile importa por Mejillones. “Hay una diferencia de precios, pero nosotros nos vemos beneficiados por que son 1,8 millones de metros cúbicos por día que es lo que necesitamos para el norte”.
Chile podría inyectar 1,8 millones de metros cúbicos de gas regasificado por día
Para esto, las exportaciones de gas desde Vaca Muerta podrían mantenerse incluso durante todo el invierno, ya que desde Martínez explicó que “todo gas que no entre en los gasoductos que van desde Neuquén a Buenos Aires puede aprovechar el espacio que aún queda en las líneas de exportación”, hacia la región central de Chile.
Precisamente, Chile es un país netamente importador, pero tienen una demanda mucho más alta en la región central, en el área metropolitana y alrededores, que pone en jaque la capacidad de sus instalaciones de regasificación, por lo que el gas de Vaca Muerta sería también una ayuda al sistema energético de esa región de Chile.
Pero esta no es la única alternativa que Nación estudia para mejorar la oferta de gas en el país en este invierno, dado que Martínez reveló además que “estamos en tratativas con Petrobras e Ieasa para que desde Brasil demanden un poco menos de energía durante los meses de invierno y nos permitan devolverla más adelante”.