Proponen usar cables de aluminio para frenar el creciente robo de cobre
Este delito aumentó de manera considerable en los últimos tiempos en todo Chubut por el aumento del precio del cobre, que cotiza en dólares. Ya se están usando conductores de aluminio, igual de eficientes y mucho más baratos.
El robo de cables y otros insumos que contienen cobre ha venido aumentado en todo Chubut en los últimos tiempos, pero de manera mucho más importante en la zona de Trelew y Rawson, en donde los robos de cables, medidores de agua y otros elementos que contienen este metal utilizado se ha convertido en un “mercado negro” que por ahora nadie parece estar combatiendo ni controlando.
El aumento de este tipo de delitos ha empezado a causar reemplazos de cables de cobre por cables de aluminio, mucho más baratos. Aunque localmente no está por ahora muy extendido, en algunas provincias argentinas ya se está utilizando desde hace unos años.
“El robo de cobre es un tema que siempre ha existido pero que ahora se da con una frecuencia mayor y está causando un perjuicio patrimonial muy importante y también afecta la calidad del servicio que le damos a los usuarios”, señaló Alfredo Montes, el gerente de Energía de la Cooperativa Eléctrica de Trelew, en una entrevista con Cadena Tiempo.
Montes tiene alguna pista sobre el trasfondo de estos robos de cables y medidores de agua: “Roban buscando cobre y también bronce, porque estimo hay algún circuito de comercialización que paga rápidamente por esos materiales. El cobre tiene en la actualidad un valor muy alto y a precio dólar, entonces seguramente hay un circuito de comercialización que está bastante aceitado porque en algún lado se vende lo que están robando en la calle”, señala Montes.
El directivo de la Cooperativa de Trelew explica que “el cobre es el metal de mayor conductividad y que más resistencia tiene, por lo cual forma parte de los bobinados y cables desde hace muchos años”. Entonces, con el aumento del precio de mercado, se convirtió en un botín muy preciado por los ladrones. “El último robo que sufrimos, que curiosamente fue un preensamblado de aluminio, que seguramente robaron pensando que era cobre, igual nos causó un saldo negativo muy importante, ya que dejó sin luz a una gran parte de la ciudad de Trelew y entre 4 y 5 millones de pesos de pérdida por los reemplazos de cables que tuvimos que hacer”.
El robo de cables también tiene enormes riesgos para quienes ejecutan la tarea, advierte Montes: “Esta gente asume un riesgo de vida enorme por unos pesos. Hace poco murió un muchacho manipulando materiales que pretendía robar. Y otro chico perdió un brazo. En general se trata de gente improvisada y que evidentemente no conocen el riesgo que toman”.
Aluminio, una solución
El uso de cables de aluminio ya es una solución para este tipo de problemática. Por ahora, poco extendido en Chubut, pero de manera más importantes en otras provincias y grandes ciudades del país: “El aluminio tiene un precio sensiblemente menor y ya está reemplazando al cobre. Es verdad que tiene menos conductividad, o sea, que para lograr el mismo efecto en una línea se necesita mayor presión, por lo cual los cables deben ser un poco más grandes, pero es muchísimo más barato. De hecho, Edenor y Edesur están yendo hacia cables de aluminio subterráneos en la Ciudad de Buenos Aires. Nosotros en Trelew ya empezamos a recambiar líneas de cobre por aluminio porque ese es el camino. Por ejemplo, lo estamos utilizando en líneas rurales, en la zona de chacras, donde ya casi todo el tendido es de aluminio”, detalla Montes.
Una ley para controlar
En la entrevista con Cadena Tiempo, el directivo de la Cooperativa de Trelew se refirió también a un proyecto de ordenanza que está cajoneado en el Concejo Deliberante de la ciudad valletana, que pretende poner mayores regulaciones y controles a la compra y venta de metales pesados: “El proyecto está en el Concejo Deliberante pero no ha avanzado. Permitiría, sobre todo a los compradores, saber que lo que están comprando no proviene de un delito. También tuvimos contactos con Gendarmería, que coincide en el fondo de la cuestión porque cuando ellos detienen a un vehículo con una carga de cobre no tienen herramientas para poder actuar”, concluye Montes.
El uso de cables de aluminio y el avance de ordenanzas municipales o leyes provinciales que controlen el mercado de metales ya está en marcha en algunos lugares, como Salta y Río Negro, en donde las legislaturas locales ya tienen avanzados proyectos que serán sancionados antes de fin de año.
Fuente: Diario Jornada