Estaba convocada para el próximo lunes pero la CEB propuso destinar fondos de un subsidio a cubrir los costos para no aplicar aumentos  y no realizar obras.

La suspensión fue promovida por la propia CEB, que cambió de planes y pretende redireccionar una ayuda nacional que en principio estaba destinada a obras y garantizar con ese recurso el congelamiento de la tarifa hasta mayo de 2022.

La autorización de este enroque todavía está pendiente y también depende de la secretaría de Energía provincial. Carlos Aristegui, presidente de la CEB, consideró que la suspensión de la audiencia pública es una señal positiva y anticipará que la Cooperativa tendrá vía libre para cambiar el destino de los fondos.

Al tener todos sus pagos al día con la proveedora mayorista Cammesa la “resolución 40/21” es un beneficio para todas las distribuidoras eléctricas del país que cumplan dicho requisito. En el caso de la CEB, podría acceder a un aporte de 377 millones de pesos, en cuotas de 22 millones mensuales.

El presidente de la CEB aseguró hoy que Energía de Río Negro todavía no los habilitó a ingresar en la operatoria nacional, pero la suspensión de la audiencia pública “por 30 días hábiles” y sin nueva fecha “está en ese contexto” y podría significar una pronta respuesta positiva para la CEB. Aristegui había dicho que decidieron cambiar el destino de los fondos “al ver lo que pasa con la pandemia y como una forma de acompañar el esfuerzo que están haciendo los asociados”.

En lo formal, el Epre informó que la suspensión es por 30 días hábiles. Cumplido ese plazo el ente “deberá comunicar a los usuarios si queda sin efecto el procedimiento de revisión extraordinaria de tarifa o en su defecto la nueva fecha en la que se celebrará la audiencia pública”.

La idea era aplicar ese dinero a obras de mantenimiento y mejoras de cableado y otra infraestructura en el oeste de la ciudad y también en los barrios del sur. Pero Aristegui dijo que el Consejo de Administración resolvió dejar sin efecto por este año el pedido de recomposición de tarifa, que en principio era de un 32%, y compensarlo con esos fondos “a fin de no afectar más a los usuarios”.