Se espera que para 2026, al menos la mitad de vehículos sean eléctricos
Según el reporte “Why Electric Cars Can’t Come Fast Enough” de Boston Consulting Group (BCG). Esta transición se está dando de manera acelerada, superando las proyecciones realizadas un año atrás. La cuota de mercado global de este tipo de autos aumentó de 8% en 2019 a 12% en 2020. Esta tendencia de crecimiento se ha mantenido a inicios del presente año.
Los gobiernos y los principales fabricantes de automóviles apoyaron constantemente a esta iniciativa y más aún de cara a la crisis del COVID-19, la participación de mercado global de automóviles eléctricos, SUV y otros vehículos ligeros creció del 8% en 2019 al 12% en 2020. Además, en lo que va de año, sigue mostrando su fortaleza.
BCG prevé que los vehículos de cero emisiones (VCE) reemplazarán a los que poseen un motor de combustión interna como la fuerza dominante de ventas poco después del 2035. La transición hacia la era del VCE, durante la próxima década, traerá grandes cambios en la mayoría de los países, pero desde un punto de vista medioambiental esta nueva era no está llegando lo suficientemente rápido.
La lucha contra el cambio climático exige una transición acelerada hacia los vehículos de cero emisiones (VCE) en los mercados a nivel mundial. Esto se puede conseguir agilizando la adopción de vehículos de cero emisiones mientras se fortalecen los incentivos para remover el gas y diésel de las autopistas.
La Unión Europea (UE), como parte del European Green Deal, se ha propuesto reducir a cero las emisiones automotrices al 2050. En los Estados Unidos, el presidente Joe Biden ha dispuesto un fuerte enfoque en emisiones de escape más estrictas y se han reincorporado al Acuerdo de París.
Los gobiernos han animado a General Motors, Volvo, Jaguar y muchos otros fabricantes de la industria automotriz a empujar con mayor fuerza hacia la electrificación. El aumento de inversión en las cadenas de suministros e infraestructura de recarga también ayudará a cumplir estas metas.
Se espera que el 47% de los vehículos ligeros que se vendan en 2025 sean totalmente eléctricos o híbridos. Esta evolución ocurrirá más rápido en la UE y China, y será relativamente lenta en naciones en desarrollo como Brasil e India. Pero sin importar el mercado, el inicio de la era del VCE es inevitable y se llevará a cabo en tres fases:
Para el 2023, se espera que los fabricantes de equipos originales brinden más de 300 baterías eléctricas y modelos híbridos enchufables al mercado, por lo que los consumidores contarán con una mayor variedad de la que tienen actualmente.
Costo de propiedad impulsado por la electrificación.Para el 2030, los conductores se transferirán a los autos eléctricos de manera masiva. La ventaja en costos estará clara, a través de las distintas regiones y segmentos. Asimismo, las primeras prohibiciones significativas a vehículos que empleen la quema de combustibles fósiles se darán durante este período.
La cuota global de vehículos de batería eléctrica subirá a 45% en el 2035; alcanzando el 54% en los Estados Unidos, el 58% en China y el 62% en la UE. Para este punto, los eventuales actores dominantes en movilidad eléctrica ya estarán largamente determinados. Cada enlace a lo largo de la cadena de valor automotriz habrá sido remodelado.
Con el objetivo de mitigar el cambio climático, los responsables políticos y el sector automovilístico no sólo deben acelerar la penetración en el mercado de los VCE. También deben moverse más rápido para retirar de circulación a los vehículos que emplean gasolina y diésel. La misión es complicada pero no imposible para todos los actuantes en esto de dejar de contaminar y no llegar al punto de no retorno.