Anticipo: el próximo Ford Fiesta podría convertirse en un crossover eléctrico inspirado en el Mustang Mach-E
Así lo señalan algunos medios de prensa europeos, que anticipan que el sucesor del hatchback utilizará la plataforma MEB de Volkswagen, aprovechando la alianza con la marca alemana. Además, será producido en la planta de Colonia, que recibirá una inversión de U$S 1.000 millones para especializarse en la producción de vehículos eléctricos.
El Fiesta fue una de las primeras víctimas del furor por los SUV’s en nuestra región luego de que Ford decidiera dejar de fabricarlo tanto en Brasil como en México. Sin embargo, en Europa sobrevivió con una nueva generación, que si bien mantiene buenos niveles de ventas, pareciera tener los años contados. Y es que la marca del óvalo ya decidió que para 2030 todos sus productos serán 100% eléctricos y el hatchback será uno de los primeros en acoplarse a esta nueva era en la compañía, un cambio que traerá aparejado otro aún más profundo: pasaría a ser un crossover inspirado en el Mustang Mach-E.
Como ya se sabe, los crossovers y SUV’s vienen desplazando a los formatos y segmentos tradicionales. De hecho, con el sucesor del Mondeo ocurrirá lo mismo, entonces, la idea de Ford no suena tan descabellada y ya demostró que la demanda está: el Puma, que pasó de ser una coupé a un crossover, viene logrando una gran aceptación, incluso mejor que la EcoSport. Es más, en Estados Unidos podría terminar reemplazándola. Volviendo al Fiesta, está previsto que la próxima generación utilice la plataforma modular eléctrica MEB de Volkswagen, aprovechando la alianza existente entre ambas automotrices. Una forma de diferenciar al producto de la marca del óvalo de su par de la firma de Wolfsburg sería justamente dotándolo de una estética más aventurera.
Otro punto que termina prácticamente confirmando estos rumores es que la firma estadounidense anunció recientemente una inversión de U$S 1.000 millones en la planta de Colonia (Alemania) para la creación de un Centro de Electrificación. Allí mismo también producirá sus vehículos que utilicen la plataforma MEB, por lo que está previsto que el Fiesta actual sea discontinuado entre 2023 y 2024 para dejar el lugar a su sucesor. El acuerdo firmado con Volkswagen para compartir su arquitectura plantea un volumen de fabricación de 600.000 unidades en 6 años, comenzando en 2023, precisamente el año en que el hatchback finalizaría su ciclo comercial.
Tal como señalamos anteriormente, el modelo de Ford replicaría el formato del Mustang Mach-E, es decir, un SUV con estilo de coupé, y tomaría como base una adaptación de la plataforma MEB en la que Volkswagen ya está trabajando. Vale recordar que esta arquitectura es utilizada en vehículos del segmento C, pero la compañía está desarrollando una versión más pequeña para el futuro ID.2, un hatchback equivalente al Polo, así como el citycar ID.1, que será el reemplazante del e-Up! De esta manera, tanto el producto del óvalo como el de VW se complementarían y no competirían entre sí.
Fuente: 16 Válvulas.