El objetivo es que las compañías descuenten la carga tributaria local de sus presupuestos con el fin de abaratar los costos.

La gestión de Marcelo Orrego tiene en su agenda de prioridades una serie de obras energéticas clave, como la ampliación de la Estación Transformadora (ET) Nueva San Juan con la instalación de un transformador y la adecuación de la interconexión de dicha estación con la de Rodeo, Iglesia, además de la expansión de esta última y una batería de trabajos complementarios.

La primera apunta a garantizar la creciente demanda y evitar cortes, mientras que la segunda es vital para el desarrollo de proyectos mineros, con su beneficio para la actividad económica. Por ello, el gobernador mandó un proyecto de ley para eximir del pago de impuestos a las empresas que realicen esas tareas, con el fin de que descuenten la carga impositiva provincial de sus presupuestos y, así, abaratar los costos.

La iniciativa ingresó a la Cámara de Diputados el viernes y lleva las firmas del gobernador Orrego y el ministro de Infraestructura, Fernando Perea. Si bien el oficialismo es minoría, hay expectativa de que se apruebe sin mayores dificultades, teniendo en cuenta que se trata de un proyecto de gestión y que ya hubo antecedentes, en las pasadas gestiones peronistas, de eximición de impuestos a obras de interconexión, como las de Calingasta y Jáchal – Valle Fértil, además de aquella vinculadas a la línea de 500 y la ET Nueva San Juan, entre otras.

En su fundamentación, se establece “un régimen tributario diferenciado” para un grupo denominado “Obras de Infraestructura Eléctrica”, el cual comprende “a la obra en sí, los contratos y subcontratos para la provisión de materiales y de equipos, consultorías para la ejecución de proyectos, estudios de asesoramiento en general, como así también la supervisión e inspección de la obra. Es decir, todos los actos, contratos y operaciones relacionados con la construcción, operación y mantenimiento, con el fin de contratos de asegurar la inmediata concreción”.

Orrego ha hecho hincapié en la ampliación energética como un beneficio tanto para los usuarios como para el sector comercial e industrial para sostener e impulsar la producción, con el foco puesto en los futuros proyectos mineros.

En ese contexto, su gestión apunta a eximir de impuestos provinciales (como Ingresos Brutos o Sellos) a las compañías que lleven adelante una serie de obras estratégicas y millonarias, con el objetivo de que reduzcan de sus presupuestos la carga tributaria local y, de esa manera, signifique una reducción del costo.

Propuestas. El gobernador Orrego encabezó el acto de apertura de sobres en la licitación para la construcción del transformador para la ET Nueva San Juan.

Las obras, por sí mismas, tendrán un impacto en la provincia, las que serán financiadas con los fondos que tiene el Ente Provincial Regulador de la Electricidad (EPRE): el Plan de infraestructura Eléctrica Provincial para el Desarrollo Socioeconómico y productivo (PIEDE) y el de Interconexión en 500 kV entre Mendoza y San Juan, los que embolsa el organismo a través de lo que cobra en la boleta de la luz.

Una de ellas es la ampliación de la ET Nueva San Juan, con la instalación del segundo banco de transformación de 450 megavatios (MVA) y obras complementarias. Oscar Trad, presidente del EPRE, había explicado que la línea que viene de Mendoza es de 500 kilovolts y trae unos 1.200 megavatios de potencia, de los cuales, la ET sólo puede transformar 450 por la existencia de un solo transformador. Así, el Gobierno apunta a colocar un segundo transformador de la misma capacidad para duplicar la potencia.

El titular del organismo regulador de la electricidad había indicado que “la demanda en San Juan viene creciendo, va a llegar un momento en que no vamos a poder abastecerla y pueden empezar a producirse cortes”. De ahí la importancia de dicha ampliación.

Además, Trad resaltó que, “en el día, nos sobra potencia y energía porque tenemos grandes parques solares. Nos falta en la noche, cuando ya no hay luz solar y no se genera”. De esa manera, al duplicar la potencia con el transformador, no sólo se va a abastecer al crecimiento de la futura demanda, sino que, también, “se van a poder instalar más parques porque hoy se encuentra limitado porque no tenemos capacidad de transformación”.

No fue lo único, ya que remarcó otro beneficio. “En el día, San Juan se puede volver exportador de energía, en algunas situaciones, porque se genera mucha energía solar desde los parques”, había destacado, al punto de graficarlo de la siguiente manera con la ampliación de la ET: “En la noche, traemos (energía). En el día, enviamos”.

Extensión. La línea Nuevva San Juan – Rodeo está energizada en 132 kV y estára bajando en llevarla a 500.n t
La gestión orreguista encaró la licitación de la construcción del transformador y, en la apertura de sobres, del 27 de junio, la empresa Tadeo Czerweny SA realizó una propuesta económica de 18.490.600 dólares, más IVA por 2.186.483 dólares. A todo ello, Trad había manifestado que están dialogando con la empresa el tema del costo.

El armado del transformador (que tiene un proceso de un año y medio) puede entrar en la ley que exime del pago de impuestos provinciales, al igual que el resto de las obras que quedan, como “la construcción de donde se monta el transformador”, en lo que se está trabajando en el pliego, había dicho Trad.

La otra obra tiene que ver con la adecuación a 500 kV de la interconexión Nueva San Juan – Rodeo, Iglesia, con el Sistema Argentino de Interconexión, a materializarse con la ampliación de la ET del departamento cordillerano y la construcción de la Playa de 500 kV y otras obras complementarias.

Según fuentes del sector, la línea San Juan – Rodeo está operando en 132 kilovolts y la tecnología con la que cuenta es para que funcione en 500. Para llevarla a su totalidad, se requiere de una inversión de gran magnitud, la que se estima en 40 millones de dólares. El proyecto de ley oficial determina que su financiamiento estará a cargo de los dos fondos que administra el EPRE.

No obstante, las fuentes indicaron que la plata también puede salir de las empresas mineras o generadores de energía, debido a que dicha línea y su estación transformadora se encuentra en Iglesia, el departamento en el que se encuentra el proyecto de cobre Josemaría, por ejemplo.

Es decir, la alternativa que planteaban las fuentes es que un generador, como YPF, por citar un ejemplo, destine fondos pasar la línea a 500 kV, construya un parque solar y recupere la inversión con la venta de energía renovable a las compañías mineras, en lo que se conoce como cobre verde.

Dicha obra beneficia el desarrollo no sólo de emprendimientos minero, sino también el abastecimiento local de energía, el impulso a la actividad económica y la instalación de parques solares.

El otro grupo de obras tiene que ver con las que se denominan como “complementarias, de menor envergadura en los segmentos de subtransmisión y transmisión en 132 kV, necesarias para la adecuada vinculación de las obras de Extra Alta Tensión (500 kV)”.

El proyecto de ley también contempla la eximición del pago de impuestos por un plazo de cinco años a todo lo vinculado con la operación y mantenimiento de dichas obras.

En los fundamentos de la iniciativa oficial, se hace mención al artículo 12 de la ley nacional 15.336, la que establece que “las obras e instalaciones de generación, transformación y transmisión de la energía eléctrica de jurisdicción nacional y la energía generada y transportada en las mismas, no pueden ser gravadas con impuestos y contribuciones, o sujetas a medidas de legislación local, que restrinjan o dificulten su libre producción y circulación”.

Por eso, el proyecto de ley de la gestión orreguista se encuentra “en armonía” con esa norma nacional y con el fin de respetar “la pirámide jurídica”. Incluso, entre los motivos se señalan que, “de continuarse exigible la obligación impositiva actualmente vigente en el Código Tributario local, se estaría frustrando, tanto el fin nacional (lograr un adecuado funcionamiento del Sistema Argentino de Interconexión, tendiente a garantizar su abastecimiento y desarrollo económico) como el fin provincial (de economía en las obras), al aumentarse los costos para la etapa de ampliación”.

En ese punto, el motivo oficial se refiere al aspecto económico: “Los oferentes que se presenten al llamado de las respectivas licitaciones públicas para la provisión de equipos y la construcción de las obras, seguramente incluirán en sus propuestas la incidencia de los impuestos, tasas, contribuciones de jurisdicción local. Tal inclusión conducirá lógicamente a un aumento del precio final”.

Así, se concluye que “los tributos locales constituyen una medida que restringe y dificulta la libre producción o circulación de la energía eléctrica. De ahí que las disposiciones del Código Tributario de la provincia resultan contrarias a las disposiciones constitucionales que facultaron a la Nación para regular en la forma más completa y armónica, el servicio de transporte interprovincial de la energía eléctrica”.

Fuente: 0264 Noticias