Cambiar 4 millones de luminarias públicas a LED permitiría un ahorro energético anual de 2.600 GWh
En la industria luminotécnica aseguran que el sector tiene capacidad para renovar las lámparas de sodio o mercurio. Generará ahorro energético, 16.000 empleos y desarrollo técnico profesional.
El Plan Nacional de Alumbrado Público presentado por la Cámara Argentina de Industrias Electrónicas, Electromecánicas y Luminotécnicas (CADIEEL) ya permitió cambiar unas 2 millones de luminarias de alumbrado público por sistemas más eficientes.
Sin embargo, todavía resta cambiar más de 4 millones de luminarias, lo que significaría una reducción del consumo de energía de casi el 70% frente a las luminarias tradicionales. Según CADIEEL, represetanría un ahorro energético anual de 2.600 GWh, equivalente a la producción anual de energía de media Central Costanera.
Desde la Cámara sostienen que frente a los aumentos en las tarifas de electricidad, los costos que los municipios deben enfrentar para el alumbrado de calles y autopistas, hacen que el cambio de luminarias en los espacios públicos sea un factor esencial para reducir el consumo y aliviar el presupuesto.
Guillermo de Guzmán, ingeniero y presidente de la Comisión de Iluminación de CADIEEL, consideró que hoy la industria nacional tiene la capacidad productiva más que preparada para dar respuesta al recambio necesario. «Esto significa un ahorro considerable en el presupuesto de los municipios y en el consumo energético. Contamos con tecnología con calidad de exportación y estamos avanzando en un parque lumínico mucho más eficiente en todo el territorio”, señaló.
Además, continuar con el reemplazo de luminarias de vieja tecnología (sodio o mercurio) por modernas y eficientes luminarias LED generaría más de 16.000 puestos de trabajo directos e indirectos, al tiempo que promueve la eficiencia y productividad de las pymes argentinas con mayor inversión para cumplir con las normativas.
Asimismo, el sector de la industria luminotécnica muestra una alta integración de la cadena de valor ya que los rubros principales cómo inyección de aluminio, fabricación de ópticas, metalmecánica de precisión, ensambladores de placas electrónicas y otros accesorios, son provistos en un 100% por empresas locales.
En este sentido cabe destacar la alta productividad de la industria nacional que permitiría avanzar en el recambio de las luminarias con valor agregado local, evitando sacrificar divisas importando productos de inferior calidad.
Y para lograr esta tarea, desde la Cámara aseguran que en el país hay suficiente cantidad de laboratorios de ensayos certificados de primer nivel y un plantel de profesionales especializados con capacidades para realizar desarrollos tanto para productos de alta gama como para el segmento competitivo de bajo precio.
“Es fundamental sostener o incrementar la escala de producción para ingresar en un nivel que nos permita convertirnos en un polo de abastecimiento de iluminación profesional para la región. Se conformaría así un circulo virtuoso “ganar-ganar” en el que la industria, los usuarios, el estado y la economía en general se benefician conjuntamente”, indicó Guzmán.
Fuente: Ambito