China Construye gran planta de energía solar espacial
El enorme proyecto chino consiste en construir una planta de energía solar espacial para abastecer de electricidad a la Tierra. El proyecto comenzará con una prueba de prototipo en 2022. Composición de imagen Luis De Luca.
Los científicos aseguran que con las tecnologías actuales serán capaces de construir una planta de energía solar gigante y mucho más eficiente en el espacio, para el abastecimiento de energía en la Tierra.
Los científicos crearán una estación espacial con paneles solares para convertir la energía solar en energía eléctrica; luego, a través de un transmisor de microondas (o un emisor láser), dicha energía se envía a un colector en nuestro planeta. Una vez recibida aquí, será reconvertida de energía de microondas a energía eléctrica nuevamente, ahora sí finalmente para su distribución y uso.
La energía solar mucho más eficiente, es una excelente propuesta frente a la actual emergencia climática global que estamos viviendo. Es un proceso que demandará tiempo y muchos esfuerzos, China ya planea lanzar una flota de paneles solares de más de un kilómetro de largo al espacio para el año 2030, comenzando así a armar este gran proyecto.Para el año 2050, se espera que esta enorme central solar espacial envíe una cantidad de energía similar a la de una central nuclear.
El apoyo al programa solar en órbita no convencional aumentó, después de que China anunciara su objetivo de carbono neutral para el año 2060.
Obviamente construir una planta de energía solar en la superficie terrestre es muchísimo menos costoso que hacerlo en el espacio, pero también es menos eficiente. Recordemos que la posibilidad de capturar energía solar desde la superficie de la Tierra está limitada al ciclo diurno de cada punto del globo, y también depende fuertemente de las condiciones meteorológicas locales, porque con la presencia de nubosidad y nieblas la llegada de los rayos solares hasta los paneles se bloquea.
Ubicar una planta solar geoestacionaria puede evitar la sombra de la Tierra y ver el sol las 24 horas del día. Además la pérdida de energía en la atmósfera también podría reducirse al mínimo (2%) enviando la energía en forma de microondas de alta frecuencia.
Otro punto a favor de construir una planta espacial, es que ahora gracias al cohete parcialmente reutilizable que desarrolló la empresa Space X de Elon Musk, y los satélites más pequeños, las cosas se facilitaron bastante. La posibilidad de construir una planta en una estación espacial ya se analiza como un posibilidad real; de hecho, la NASA en un estudio de 2018 especificó que el costo de un lanzamiento se redujo en un factor de 20 durante la década anterior. Es preciso mencionar que en el proyecto chino para construir esta planta necesitará hasta cien lanzamientos, pero del cohete super pesado Changzheng-9 (Larga Marcha 9) hecho en China.
Esta revolucionaria tecnología podría cambiar las reglas del juego frente a la emergencia climática global, pero proyectos grandes como este requieren que su desarrollo esté dentro de una asociación internacional, resultaría muy complicado que una sola nación emprenda este esfuerzo a gran escala por sí sola.
Estados Unidos, Japón y algunos países europeos, están desarrollando proyectos con intenciones similares. Por ejemplo, en Gran Bretaña estudiaron cómo la energía solar del espacio podría ayudarlos a alcanzar una economía de emisión neta cero para 2050. El informe de los consultores Frazer-Nash (con asistencia de otras empresas europeas), exponen que la energía solar recolectada en el espacio y “trasladada” a la Tierra no sólo es tecnológicamente posible, sino que además económicamente les resulta una alternativa interesante.