Los bancos internacionales, las compañías mineras y numerosos fondos de inversión promocionan las promisorias perspectivas de largo plazo que tiene la explotación de cobre.

El cobre es un metal abundante y menos costoso de extraer que el oro, lo que tiene un impacto directo en la sostenibilidad. En el último lustro, su valor ha crecido por encima del 50%. Es extremadamente maleable y tiene gran ductilidad, permitiendo su uso en la fabricación de cables y otros componentes que requieren flexibilidad.

También, es reconocido por ser uno de los mejores conductores de electricidad y calor: esta propiedad lo convierte en esencial para la industria eléctrica y electrónica.

En Argentina, a pesar de compartir la cordillera de los Andes con Chile (principal productor mundial de cobre) no se aprovechan aún las vetas: no existen explotaciones luego de que se cerrara Bajo la Alumbrera, en Catamarca, tras más de dos décadas de actividad, solo proyectos.

La creciente demanda de este mineral proviene de sectores en auge como los fabricantes de vehículos eléctricos, la energía renovable y la inteligencia artificial.

La era del cobre

Argentina (en Catamarca, Salta, Mendoza y San Juan) podría ubicarse en la próxima década dentro de la lista de los diez principales productores del mundo con unas 810 mil toneladas anuales, según la proyección de la Cámara de Minería.

En Catamarca, el proyecto Minera Agua Rica Alumbrera se lleva adelante con fuerte resistencia por parte de la población de Andalgalá, nucleados en asambleas ambientalistas. Reclaman la protección de los recursos hídricos y territoriales de la zona. La movida involucra inversiones por 3.100 millones y un objetivo de 155.000 toneladas anuales de producción.

En la provincia de San Juan hay dos proyectos en construcción. El primero es el yacimiento Josemaría. Se ha anunciado la llegada de 4.100 millones dólares y se podrán alcanzar las 131 mil toneladas cada doce meses.
También en San Juan, está Pachón, con una financiación de 4.500 millones de dólares, y 280.000 toneladas anuales de producción.

En la provincia de Salta se erige Taca Taca, una jugada que supone 3.580 millones dólares y una producción anual estimada de 244.000 toneladas.

En Mendoza, el gobernador Alfredo Cornejo confirmó que enviará pronto al parlamento una «ley corta» para atraer inversiones mineras a la provincia. San Jorge, cerca de Uspallata, es uno de los proyectos relacionados con el cobre. Está avanzada su exploración y se encuentra a un paso de pasar a la fase de explotación, pero todavía se aguarda la aprobación de la Declaración de Impacto Ambiental. En esa localidad, los vecinos consideran que también se debería actualizar el estudio de factibilidad del proyecto.

De acuerdo a proyecciones elaboradas por la Agencia Internacional de Energía, para 2040 la demanda global de minerales y de metales para las tecnologías de energía limpia se duplicaría.

Fuente: Diario Uno