El cuento nuclear de nunca acabar
Los costos de los nuevos reactores se disparan mientras los retrasos se alargan indefinidamente. Varios reactores nucleares en el mundo en construcción se demoraron, se demoran y seguirán demorándose con increíbles e inesperados sobrecostos. Hay también otros motivos de abandonos.
Se pensaba que costaría 19.000 millones de dólares. Ahora ya se sabe que será alrededor de 40.000 millones. Según el contratista francés Electricité de France (EDF), podrá estar lista para funcionar en 2027.
Estados Unidos: El 31 de julio último, la central nuclear Vogtle 3 de Georgia, Estados Unidos, entró oficialmente en funcionamiento comercial. La construcción de Vogtle 3 y 4 ha tardado una década en completarse, con un costo estimado hace 10 años en 14.000 millones de dólares. Hoy antes de terminarse el segundo reactor, la inversión supera los 34.000 millones.
Francia: Recientemente informó la empresa eléctrica estatal EDF que el reactor nuclear de nueva tecnología EPR de Flammanville, en construcción desde 2007, tendrá otros seis meses de retraso y un nuevo sobrecosto de 500 millones de euros. De 12.700 pasa 13.200 millones de euros, y debería arrancar a mediados de 2024. Inicialmente iba a tener lugar en 2012.
Su construcción, que comenzó en diciembre de 2007, ha estado plagada por problemas técnicos de todo tipo.
El Tribunal de Cuentas estimó en 2021 que los 12.700 millones de euros eran en realidad 19.100 si se incluían intereses y otras partidas. El costo inicial estimado era de 3.300 millones de euros.
Finlandia: Un reactor similar comenzó a operar en Olkiluoto en diciembre del año pasado, con doce años de retraso sobre el calendario previsto, y todavía no está al 100% operativo.
En su momento se batía el parche que sería la primera central nuclear que se construía en Occidente en los últimos 25 años y sería el ejemplo de renacimiento de la tecnología nuclear.
Olkiluoto 3, es el reactor nuclear más grande de Europa por capacidad, comenzó la producción regular de electricidad 14 años después de lo previsto inicialmente. Se estima que representará el 30% de la generación de energía de ese país, afirmó la compañía TVO encargada de operar de la planta.
El reactor tiene unos 1.600 megavatios de capacidad. Ha registrado numerosos problemas operativos durante años y es el primero en comenzar la producción en más de cuatro décadas. Se espera que genere electricidad durante los próximos 60 años.
Austria: La central nuclear de Zwentendorf, nunca llegó a funcionar porque la ciudadanía en plebiscito votó en contra de la energía atómica.
Argentina: La construcción de la Central Nuclear Atucha II, comenzó en 1982 y estuvo paralizada de 1994 hasta 2006. Se encuentra en la localidad de Lima, partido de Zárate, y cuenta con una potencia de 745 Mwe. La piedra fundamental se colocó en 1982.
Alcanzó su primera criticidad el 3 de junio de 2014, y el 27 de ese mismo mes se sincronizó al Sistema Interconectado Nacional. (32 años desde el inicio, 20 en construcción y 12 detenida)
Irán: En 1981 se acordó con Alemania la instalación de una planta de energía nuclear en Busher. Cuando se completó aproximadamente el 70% del proyecto, los contratistas alemanes lo abandonaron debido a la revolución iraní. Después de la revolución se reinició la construcción, pero se interrumpió nuevamente cuando la ciudad fue bombardeada en la guerra entre Irán y Irak. La administración de Teherán firmó un acuerdo con Rusia en 1995 para la terminación de la planta.
Moscú había prometido entregar a fines de 2000, pero no pudo completar por razones políticas. Comenzó a funcionar a plena capacidad recién en 2012 y fue entregada a Irán en septiembre de 2013.
Con una capacidad de 1.000 MW, ubicada en la costa del Golfo Pérsico, comenzó sus operaciones con la producción de 60 MW de electricidad el 4 de septiembre de 2011 y aumentó a 940MW en abril de 2012. La segunda unidad todavía está en construcción.
Cuba: La Central Electronuclear de Juraguá (CEN), se canceló sin terminar en 1992, cuando desapareció la URSS. El dos de septiembre de 1992, Fidel Castro anunció la paralización de las labores del que habría podido ser el primer generador nuclear de electricidad en el país.
Rusia: La caída de la URSS causó graves abandonos de instalaciones nucleares. Los RTG por sus siglas en inglés (Radioisotope Thermoelectric Generator), son especie de baterías atómicas que pueden generar energía eléctrica durante décadas de forma autónoma, sin combustible alguno. Por ello han sido, y son, utilizados para suministrar energía a equipos o instalaciones de difícil acceso.
La URSS instaló miles de estos generadores en su costa ártica, con la finalidad de abastecer de energía a faros, balizas de radionavegación, etc.
Tras la caída, los RTG quedaron sin control alguno. Y por ello fueron susceptibles de ser saqueados y destrozados por chatarreros para aprovechar y revender sus materiales. Cosa que ha ocurrido con funestas consecuencias.
Las nuevas centrales nucleares no son minas de oro. Son agujeros económicos. Hemos visto historias como estas varias veces.
Fuente: El Chubut