El Estado baja de a poco la deuda eléctrica que supera los $137 mil millones tras acuerdos con algunas prestadoras provinciales
Edesur y Edenor, que juntas representan el 22 por ciento del total de los más de 150 mil millones de pesos adeudados, quedarán para más adelante. Cammesa firmó junto al área de Energía acuerdos con Formosa y Santiago del Estero y las próximas son Santa Fe y Chaco, entre otras. Esta última (REC y Energía FSA) mantiene una deuda por 233 millones de pesos. Las distribuidoras podrán canjear parte de lo que deben por un plan de inversiones, que deberá ser aprobado.
Según indicó la Jefatura de Gabinete en su informe ante el Senado, la deuda total de las distribuidoras del país, incluidas grandes compañías integradas verticalmente y cooperativas, ascendía a los 137 mil millones de pesos a septiembre del año pasado.
Ante el congelamiento tarifario que operó hasta junio de este año, empresas como Edesur, Edenor y EPE Santa Fe se endeudaron con Cammesa. Las distribuidoras no le pagan a la administradora del mercado mayorista eléctrico y hacen que la compañía,integrada por las empresas del sector y con fondos del Estado, no pueda pagar las importaciones de gas que se necesitan para la generación de energía térmica.
Santiago Cafiero indicó que en abril de 2019 la cobrabilidad de Cammesa era del 91 por ciento, y 2 años después en abril de este año había descendido 30% totalizando un 61.
En septiembre del año pasado, Edesur mantenía una deuda con el Estado de 14.148 millones de pesos, mientras que Edenor 16.306 millones. En Buenos Aires le siguen Eden con una deuda de 3006 millones de pesos, Edelap ($2.847 millones) y Edea ($2.428 millones).Luego de las dos grandes distribuidoras del AMBA, la que más le debe al Estado es la santafesina EPE, con una deuda de 12.316 millones de pesos.
Con esto el Gobierno busca que el 50 por ciento del total de la deuda con la compañía mayorista se canjee en función de dos variables. Por una parte, contra las facturas impagas de su clientela, la mayoría residencial y por otra, se les exigirá a las distribuidoras un plan de inversiones y/o un programa de eficiencia energética.