Pronostican un repunte de la demanda global de electricidad para el año próximo
La Agencia Internacional de la Energía indicó que en 2023 el requerimiento crecerá apenas un 2%, pero advierte que hay que preparar capacidad renovable para 2024.
La actual crisis energética y la recesión económica van a ralentizar el crecimiento de la demanda mundial de energía en 2023. Sin embargo, frente a un probable repunte en 2024, será necesario desarrollar más capacidad de renovables, señaló la Agencia Internacional de la Energía (AIE) en un informe difundido el mes pasado.
La tasa de crecimiento mundial del consumo energético se situará ligeramente por debajo del 2% en 2023, frente al 2,3% de 2022. Ambos números están por debajo de la media de los cinco años anteriores al Covid-19, que fue del 2,4%. Para 2024, en tanto, se espera que la tasa aumente hasta el 3,3%, a medida que mejoren las perspectivas económicas.
La agencia, con sede en París, predijo que las energías renovables cubrirían el crecimiento previsto este año y el próximo, y que la energía procedente de fuentes renovables superaría por primera vez un tercio del suministro eléctrico mundial total el año que viene. Sin embargo, la energía hidroeléctrica ha disminuido, cayendo alrededor del 2% en 2020-2022 en comparación con las cifras de 1990-2016, lo que representa alrededor de 240 TWh.
«Anticiparse a los desafíos sobre la energía hidroeléctrica relacionados con el cambio climático, y planificar en consecuencia, será crucial para el uso eficiente y sostenible de los recursos hidroeléctricos», dijo la AIE.
Según la AIE, el crecimiento de las energías renovables debería contribuir a reducir las emisiones mundiales, ya que se espera que el aumento de las emisiones en China e India se vea compensado por el descenso en otros países en los que el despliegue de las energías renovables está creciendo y el gas natural sigue sustituyendo al carbón. Solo la Unión Europea es responsable del 40% del descenso total de las emisiones procedentes de la generación de electricidad.
Fuerte caída en la UE
En el primer semestre de este año, la UE registró un descenso del 6% en la demanda de electricidad, ya que las industrias que consumen mucha energía, como las del aluminio, el acero, el papel y los productos químicos, redujeron su consumo en respuesta a los altos precios. Un invierno relativamente suave también tuvo un impacto más limitado en la reducción de la demanda.
Los precios al por mayor de la electricidad han bajado significativamente desde los récords alcanzados el año pasado como consecuencia de las perturbaciones causadas por la invasión rusa de Ucrania. Sin embargo, los precios medios en Europa siguen siendo más del doble de los de 2019, los de la India han subido un 80% y los de Japón más del 30%.
Los precios en Estados Unidos, sin embargo, han retrocedido casi hasta los niveles de 2019. Se espera que la demanda del país disminuya un 1,7% en 2023 debido a la ralentización del crecimiento económico, y que repunte en 2024 hasta el 2%, por debajo del 2,6% registrado en 2022.
Asimismo, se prevé que el crecimiento proceda de un mayor uso de electrodomésticos, un aumento del uso de maquinaria eléctrica, un incremento de los vehículos eléctricos y una mayor demanda de refrigeración.
Fuente: Cronista