El próximo viernes 19 finaliza el plazo de concesión que fue extendido por el gobierno de Alberto Fernández. Desde las empresas esperan que el gobierno de Milei vuelva a postergar el plazo, que podría llegar hasta agosto.

En medio de la polémica y las gestiones que realiza el gobierno de Javier Milei para aplicar cambios estructurales en el país, primero con el DNU 70/23 y luego con la denominada ley ómnibus, las cinco centrales hidroeléctricas de la región están a apenas dos semanas de quedarse sin concesionarios. Y es que el plazo inicial de concesión venció el año pasado, fue prorrogado por el anterior gobierno nacional, pero sin cambios a la vista, finaliza este viernes 19.

Desde las empresas concesionadas consultadas se reveló que esperan que en los próximos días el secretario de Energía de la Nación, Eduardo Rodríguez Chirillo, emita un resolución o disposición que corra nuevamente el filo de la guillotina los contratos de concesión.

Si bien desde antes de la asunción de Milei esa fue la promesa del ahora gobierno, en lo concreto son tan pocas las resoluciones que ha firmado el titular de Energía que hasta ayer seguía sin designar siquiera a sus subsecretarios.

Y es que la agenda del sector está al rojo vivo. El próximo lunes se realizará la audiencia pública para definir la nueva tarifa del gas natural, un proceso en el que se había anticipado la quita de subsidios pero ahora se vislumbra que se morigeraría esa reducción, para hacerla gradual.

A la vez, Rodríguez Chirillo fue una de las personas que estuvo abocado a la propuesta de modificación de la ley madre del sector de los hidrocarburos la 17.319 que se proyectó modificar en más de 40 artículos con el proyecto de ley denominada ómnibus.

Y en esas corridas, las centrales de la región del Comahue ven pasar los últimos días del plazo extendido de concesión que dejó el anterior gobierno, ya que -salvo en un caso- las concesiones originales dadas durante el menemismo vencieron en agosto pasado.

En detalle, los complejos que están a poco más de 15 días de quedarse sin operador formal son El Chocón y su compensador Arroyito, que es operado por la empresa Enel Argentina. Alicurá que está en manos de AES Argentina, Piedra del Águila concesionado a Central Puerto, y el único complejo ubicado sobre el río Neuquén, Cerros Colorados – Planicie Banderita que recientemente fue adquirido por el grupo Aconcagua Energía.

A excepción de Piedra del Águila que venció su concesión original el pasado 29 de diciembre, las demás centrales hidroeléctricas finalizaban su plazo de 30 años el pasado 11 de agosto. De acuerdo con el contrato de concesión, Nación puede prorrogar esa finalización por un año, es decir hasta agosto de este año y cuatro casos y diciembre en uno más, sin necesitar realizar nada más que una disposición.

Esto es lo que las empresas esperaban que sucediera según el contacto que habían tenido con el entonces futuro gobierno luego del balotaje presidencial, pero hasta la fecha nada sucedió y la espera desespera no solo a las concesionarias, sino en especial a los cerca de 120 trabajadores que se desempeñan en estos complejos.

Mientras el gobierno de Milei ha dado signos de hacer borrón y cuenta nueva con la intención de la anterior gestión de reestatizar el manejo de las centrales, e incluso de darle una participación a las provincias de Río Negro y Neuquén, hoy el escenario se encamina aún más hacia ese sentido a raíz del paso del tiempo sin que se hayan tomado medidas para cambiar el actual esquema de operaciones.

Desde los gobiernos provinciales los reclamos por una participación en las centrales también parecen acallados, dejando como una alternativa lo que las mismas operadoras ya analizan como una posibilidad: el cobro de una nueva tasa provincial por el uso del agua.

Fuente: Cronista