El secretario de Energía, dijo este miércoles que al tomar el control de la gestión en su área se encontró con “un sistema energético que está desinvertido, desfinanciado y es ineficiente con alto riesgo de desabastecimiento”.

“Esta situación de déficit, desfinanciamiento y desinversión nos da un cuadro muy preocupante en el sector eléctrico. El sistema no es autosuficiente, y eso no logramos conseguirlo hace mucho tiempo”, añadió.

Sobre el tema, el funcionario vaticinó que la situación del sector energético es “alarmante”, y puso como ejemplo que “la balanza comercial de los últimos diez años dio una pérdida acumulada de 30.000 millones de dólares. La situación preocupante del sector energético requiere de medidas muy importantes, que a veces se tomarán mediante decretos y resoluciones”.

El objetivo de su gestión según lo expresado es “recuperar confianza en la inversión introduciendo reglas claras y simples para mercados abiertos”, y destacó que el proyecto de ley de “Bases y Puntos de Partida para la Libertad de los Argentinos” es crucial para eso.

Al participar en la segunda sesión de discusión sobre la llamada «ley ómnibus» (que ya se había desarrollado el martes) en la Cámara de Diputados, Rodríguez Chirillo enfatizó la necesidad de un régimen de iniciativa privada para la creación de gasoductos y estaciones de GNL.

Además recalcó la necesidad de “construir un sendero de precios para recuperar costos y dar señales para la inversión, incentivar inversiones con estabilidad fiscal y aggiornar los tratados de protección de inversiones. Necesitamos inversión nacional y extranjera para lograr ser un país exportador”.

Respecto al sector eléctrico, Rodríguez Chirillo alertó que “al no haber inversión en generación, la potencia disponible está muy cerca de la demanda máxima, con lo cual los riesgos de corte son muy altos”.

Asimismo, informó que la tarifa que pagan los usuarios de energía cubre únicamente el 40% del costo de suministro, lo cual lleva a que el Estado financie con recursos propios el sistema con 7.200 millones de dólares en 2023.

“Los cuadros tarifarios, al estar congelados desde 2020 (tuvieron luego ajustes parciales), han fomentado el crecimiento de la demanda porque cuando la energía está barata se gasta más de lo que se necesita”, sostuvo.

Rodríguez Chirillo resaltó que lo que quiere el Gobierno es que los usuarios puedan elegir libremente a qué empresa de electricidad contratan, “de un modo parecido a como sucede en la telefonía móvil, donde cada cuál elige su prestador del servicio”.

En cuanto a los hidrocarburos, explicó que el Gobierno impulsa un cambio de paradigma vinculado a “reconocer el derecho de las empresas a la libre comercialización al exterior de petróleo y gas, sujeto a la no objeción de la Secretaría de Energía, que solamente podrá hacerlo en caso de sobreprecio en el abastecimiento local”.

“La propuesta es que el Estado libere el precio y el biodiesel aumente el corte obligatorio de 7 a 10%, para ir creciendo hasta el 15% en el 2026. Eso nos va a alinear con Brasil. En Bioetanol se mantiene el 12 y se aumenta al 18% en tres años para seguir un sendero hasta el 27%”, dijo para concluir el secretario de Energía.