La planta produciría hasta 1 millón de autos al año, en línea con la ambición de la empresa de vehículos eléctricos de Elon Musk de que todas sus fábricas alcancen esa capacidad.

Tesla Inc. está cerca de sellar un acuerdo preliminar para instalar una fábrica en Indonesia, a medida que la empresa de vehículos eléctricos de Elon Musk busca capitalizar las reservas de metales clave para baterías de la nación del sudeste asiático.

La planta produciría hasta 1 millón de autos al año, señalaron fuentes cercanas, en línea con la ambición de Tesla de que todas sus fábricas a nivel mundial alcancen esa capacidad. Las discusiones incluyen planes en torno a múltiples plantas en el país, que cumplen diferentes funciones en la producción y la cadena de suministro. Todavía no se ha firmado un acuerdo y el trato aún podría fracasar, agrego otra de las fuentes, que pidieron no ser identificadas ya que las conversaciones son confidenciales.

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Musk y los representantes de Tesla no respondieron de inmediato a un correo electrónico en busca de comentarios. Al ser consultado este miércoles sobre el posible acuerdo, el ministro de Inversiones de Indonesia, Bahlil Lahadalia, dijo que las negociaciones con Tesla están siendo dirigidas por el Ministerio de Asuntos Marítimos e Inversiones. Un representante del Ministerio no respondió de inmediato a las solicitudes de comentarios.

Elon Musk y Tesla

Indonesia ha cortejado durante mucho tiempo a Tesla y el año pasado alcanzó un acuerdo de suministro de níquel de US$5.000 millones con el fabricante de automóviles. En una entrevista con Bloomberg News realizada en agosto, el presidente, Joko Widodo, dijo que el país quiere que Tesla fabrique autos eléctricos allí, no solo baterías, y está dispuesto a tomarse el tiempo para convencer a Musk de que vea a Indonesia como algo más que un simple proveedor de recursos clave.

La fábrica en Indonesia sería la tercera de Tesla fuera de su mercado local en Estados Unidos, y se sumaría a las plantas en Shanghái y a una situada cerca de Berlín. Si bien Indonesia ofrece una puerta de entrada a los 675 millones de consumidores del sudeste asiático, es un mercado difícil para los fabricantes de automóviles mundiales, dado que autos más asequibles —por lo general con un precio inferior a US$20.000— constituyen la mayor parte de las ventas.

Fuente: Perfil