Yacyretá está produciendo un 30% menos de energía por la bajante del Río Paraná
La central hidroeléctrica puede abastecer a un 15% del sistema eléctrico. Es el nivel más bajo en años.
El fuerte descenso en el caudal del río Paraná no sólo genera problemas en la navegación de los grandes barcos mercantes y pérdidas en el sector agroindustrial, sino que también afectó al sistema de generación de energía eléctrica. Pero, como pasó la ola de frío polar -que provocó altos niveles de consumo eléctrico en Buenos Aires-, el problema logró disimularse.
En junio, la central hidroeléctrica Yacyretá generó 309.260 megawatts (MWh) menos que en idéntico mes de 2020. La generación bruta de energía pasó de 1.098.676 (MWh) apenas 789.416 MWh en términos mensuales.
La caída del 30% llevó a Yacyretá a sus niveles de generación más bajos en mucho tiempo. Antes de abril, la generación mensual nunca había bajado del millón de MWh. Ya en ese mes y en mayo se había ubicado cerca de 930.000 MWh, que ya eran niveles bajos. Cuesta encontrar registros inferiores a los actuales, según especialistas.
Esa tendencia no se revertiría en los próximos meses porque no se prevén lluvias intensas al menos hasta octubre. El caudal del Paraná está al menos un 40% debajo del promedio.
Yacyretá y Salto Grande conforman la oferta de generación hidroeléctrica. Esta forma de generación (en base a agua) tiene menos incidencia en el sistema que la térmica, que representa casi un 60% de la oferta.
La disminución de Yacyretá contribuyó a que Argentina tenga que recurrir a más cantidad de gas importado y combustible líquidos, que se utiliza para la generación térmica.
Esa modalidad generó un sobrecosto de $ 36.500 millones solo en junio, según estimaciones de Energy Consilium, la consultora que encabeza el ex ministro de Energía Juan José Aranguren. El calculo está hecho sobre la suposición de que el gas hubiera sido nacional, que se paga a menor valor que el importado.
Los especialistas estiman que Yacyretá venía aportando alrededor del 15% del consumo eléctrico del país en los últimos años. Pero la represa depende de los caudales de ríos que la alimentan.
Yacyretá es administrada por un acuerdo binacional entre Argentina y Paraguay. En 2019, se anunció la obra del brazo de Aña Cuá, que podría incrementar un 9% su generación eléctrica. La ampliación, que tomará 4 años, requiere un desembolso de US$ 400 millones, que la administración anterior ya había iniciado.
Yacyretá y Cammesa -la administradora mayorista del sistema eléctrica- pasaron por distintas situaciones de incumplimiento (falta de pago) de alguna de las partes.
Las obras anunciadas tratan de aprovechar una vertiente para llevarla hacia una zona seca en tierra. Allí se pensó una sala de máquinas con las tres turbinas que convierten el caudal en energía Y, por otro lado, van devolviendo el río a su cauce natural.
La represa, que fue inaugurada en 1998 junto con Paraguay, demandó miles de millones de dólares en su construcción. Oscar Thomas, director durante una década de Yacyretá, estuvo detenido por la causa de los «cuadernos», pero fue excarcelado. Thomas también fue titular de Ebisa, firma que controlaba proyectos hidroeléctricos con países vecinos.
Yacyretá nunca generaba menos de 1 millón de MWh. Pero en junio bajó a 789.416 MWh.