Un reciente informe de Cammesa generó conciencia sobre la inadecuada capacidad de generación eléctrica para cubrir el pico de demanda de este verano, lo que podría provocar apagones generalizados en todo el país.

Según las estimaciones, el Sistema Interconectado Nacional se anticipa que su demanda aumentará por cerca de 1.700 megavatios, una cantidad notable que supera las reservas térmicas disponibles después de la cancelación de licitaciones el año pasado.

El presidente de la EUCOP, Remo Bolognesi, afirmó que “si no se toman medidas inmediatas para contratar nuevas reservas operativas y asegurar importaciones de energía, enfrentaremos una crisis energética sin precedentes”. En este sentido, el funcionario destacó la importancia crucial de estas acciones para evitar interrupciones severas en el suministro eléctrico y para garantizar la disponibilidad de agua potable, porque “las perforaciones dependen de energía eléctrica y cualquier corte prolongado podría afectar seriamente nuestro sistema de provisión”.

El representante del ente está claramente preocupado por la capacidad del Gobierno nacional para responder a esta situación. “Es fundamental que el Gobierno actúe con celeridad y eficacia para asegurar que el sistema energético pueda soportar la demanda estacional y proteger a los ciudadanos de los impactos adversos”, señalo para concluir.