La fase de pruebas energéticas comenzó el pasado lunes con el envío de 60 megavatios (MW) al norte argentino, según informó Frank Molina, ministro de Hidrocarburos y Energía de Bolivia.

El gobierno de Bolivia informó hoy que una nueva línea de conexión eléctrica que uniría la subestación transformadora de Yaguacua, Bolivia, con la de Tartagal, Argentina, entró en fase de prueba esta semana.

La fase de pruebas energéticas comenzó el pasado lunes con el envío de 60 megavatios (MW) al norte argentino, según informó Frank Molina, ministro de Hidrocarburos y Energía de Bolivia.

La línea de transmisión, que es de 132 kilovoltios, tiene una longitud del orden de 120 kilómetros (46,49 kilómetros en Volvalia y 73,88 kilómetros en Argentina) y una capacidad de tránsito de hasta 120 MW.

Según un cable de la agencia de noticias ANSA, la construcción se inaugurará formalmente en «principios de abril» en un acto en el que estarían presentes el presidente Alberto Fernández y su homólogo boliviano, Luis Arce.

Edgar Caero, viceministro de Electricidad y Energases Alternativas, explicó que «la capacidad de generación eléctrica instalada en Bolivia alcanza los 3.600 MW frente a una demanda del mercado nacional de 1.650 MW, lo que permite contar con una importante reserva para exportar» a otros países .

Molina pronosticó que, además de Argentina, Electrobras do Brasil sería un nuevo mercado potencial para la exportación de energía eléctrica de Bolivia.

Según información proporcionada por la Secretaría de Energía de Argentina en una comunicación del año pasado, el proyecto permitirá un suministro confiable y amplio de energía para la ciudad de Tartagal, así como para comunidades cercanas como Orán, Piquirenda, Tabacal, Pichanal, Senda Hachada y Dragones. facilitando la conexión con San Juancito.

Al mismo tiempo, la conversión eléctrica reducirá las emisiones contaminantes y los costos asociados al uso de combustibles líquidos para generar electricidad.