Optimizando el consumo de energía: El futuro del cobro de tarifa eléctrica según horarios
El gobierno argentino ha decidido implementar un nuevo esquema tarifario en el sector eléctrico con el objetivo de asemejar el sistema de precios al de Estados Unidos. Esta medida busca introducir cambios significativos en la forma en que se factura la electricidad, tomando en cuenta no solo la cantidad de energía consumida, sino también el momento en que se realiza dicho consumo.
En la actualidad, en Argentina, el sistema de tarifas eléctricas se basa en el consumo de luz y la zona geográfica en la que se encuentra el usuario, sin considerar el horario en que se utiliza la electricidad. En contraste, en países como Estados Unidos, se establecen horarios «pico» y de «baja demanda», lo que significa que el precio de la electricidad varía según el momento del día en que se consume, incentivando el uso eficiente de la energía.
Para llevar a cabo este cambio, el Ente Nacional Regulador de la Electricidad (ENRE) ha oficializado nuevas tarifas que podrían ser consideradas como una transición hacia un sistema de segmentación por franjas horarias. Esto implicaría que los usuarios paguen más o menos dependiendo de la demanda energética en ese momento, además de su consumo y condición económica.
Para implementar este nuevo sistema, será necesario contar con medidores inteligentes que permitan recopilar datos de consumo en tiempo real. De esta forma, los usuarios podrán conocer los ciclos de alta y baja demanda energética y ajustar su consumo en consecuencia. Actualmente, el ENRE ha creado un Comité de Estudio de Redes Inteligentes para analizar la introducción de estos medidores en las áreas de concesión de Edenor y Edesur.
En cuanto a los nuevos esquemas tarifarios en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), se han establecido aumentos significativos para los usuarios de diferentes niveles de ingresos. Según el ENRE, los usuarios de mayores ingresos verán un aumento promedio del 20%, mientras que los de menores ingresos podrían experimentar incrementos del 93% y 130% para los de ingresos medios.
Además, la Secretaría de Energía ha fijado los Precios de Referencia de la Potencia (POTREF) y el Precio Estabilizado de la Energía (PEE) en el Mercado Eléctrico Mayorista (MEM), que deberán ser utilizados por las distribuidoras para aplicar los nuevos cuadros tarifarios. Estos precios se han establecido en $59.298 por megawatt-hora hasta el 31 de julio, con bonificaciones para usuarios de diferentes niveles de ingresos.
En resumen, el gobierno argentino está implementando cambios significativos en el sistema tarifario eléctrico con el objetivo de promover el uso eficiente de la energía y asemejar el sistema de precios al de países desarrollados como Estados Unidos. Estas medidas implicarán aumentos en las tarifas eléctricas para la mayoría de los clientes residenciales, reflejando el atraso en las tarifas y la necesidad de adaptarse a un sistema más moderno y eficiente.
Fuente: Titulares