La situación financiera crítica afectará en las cooperativas en especial y las principales distribuidoras de energía de la provincia.

En entidades que integran 143 cooperativas, 128 de las cuales son proveedoras de electricidad, la Federación de Cooperativas de Electricidad y Servicios Públicos de la Provincia de Buenos Aires (FEDECOBA) se informó de la imposibilidad material de cumplir con las obligaciones para la prestación del servicio público de distribución de energía eléctrica en un contexto de alto nivel de inflacionario.

Según informó el medio de Balcarce, La Vanguardia, bajo esta circunstancia, la empresa Cammesa inició los procedimientos de embargo contra las cooperativas eléctricas; Según fuentes oficiales, la deuda alcanzó los $490.925 millones a febrero de 2024.

Sin embargo, el Gobierno nacional ha decidido invertir en nueve pequeñas cooperativas de la provincia que prestan servicios en Barker, Brandsen, Chacabuco, Las Flores, Luján, Necochea, Olavarría, Villa Gesell y Zárate. Estas nueve cooperativas representan el 12% de la deuda total.

El insuficiente ingreso del componente conocido como Valor Agregado de Distribución (VAD), cuyo objetivo es afrontar los costos de construir, operar y mantener la infraestructura de la red eléctrica (el último incremento percibido datos de abril de 2023), presenta una gravedad en las distribuidoras eléctricas en su totalidad y en las asociaciones con la Federación.

En este sentido, se advirtió que el panorama está evolucionando. De este modo, las cooperativas se encuentran ante la incapacidad de remunerar todos sus gastos operativos, sea el gasto de energía, la compra de los insumos necesarios para prestar el servicio o el propio pago de los salarios a sus trabajadores, ya que esto genera un grave conflicto económico y social en las comunidades en las que están encabo.