El presidente de la cooperativa santarroseña, Alfredo Carrascal, dijo que por el aumento de insumos y sueldos es necesario un incremento en los ingresos de la compañía mediante una suba en las tarifas. «Los usuarios lo van a entender, es necesario.Hemos tenido muy ajustadas las actualizaciones de facturas. Sin embargo, hemos tenido un año con un índice de crecimiento del dólar muy importante.

Por lo tanto, los insumos, que son la mayoría dolarizados, han crecido mucho y por supuesto que se han llevado adelante las paritarias y los sueldos se han actualizado en lo que se ha podido. Eso no se ha trasladado al cien por cien a la factura», afirmó. Hay una abultada deuda que en este momento ronda los $200 millones de las personas asociadas.

Todo esto se suma al congelamiento acordado con el Gobierno provincial terminó a fines de 2020, dijo que “una actualización tarifaria nos parece que es factible porque hay razonabilidad y la APE tiene todos los números en la mano. No cabe ninguna duda que es razonable, que el asociado va a entender que es necesario autorizar las tarifas, como también se va a entender que el Gobierno provincial hizo un esfuerzo por subsidiar, pero todo tiene un límite y en algún momento hay que volver a cargar en el recibo lo que cuesta el servicio».

Carrascal también dijo que la CPE sigue con un balance deficitario y que el año pasado cerró con déficit, aunque los ingresos de otros sectores como Telecomunicaciones –»es superavitario aunque no tiene excedente fabuloso»- permiten mantener las cuentas equilibradas.

«Tenemos prácticamente una facturación mensual en la calle. El índice de morosidad es de alrededor de un 10 % en noviembre y diciembre, cuando el histórico de la Cooperativa era un 2 o 3 %. No nos sorprende porque hay sectores que han sido muy golpeados», advirtió sobre la fuerte morosidad de los usuarios pero se mostró confiado en los planes de regularización de deudas.